Tips para armar el itinerario por Europa

Mis primeros viajes a Europa fueron los planee de la siguiente forma: comprar un pasaje de avión a Europa, el más barato que encontrara y luego decidir a que lugares iria conectando con mi ciudad de llegada y salida. Llenar los espacios en el medio de los vuelos es una de las partes más placenteras de planear un viaje de este tipo. Es ver, posteriormente, como lo que uno reviso durante horas en su cuarto, oficina o biblioteca, se convierte en algo real, en un viaje a experimentar.


 

Volviendo al comienzo, nunca empiezo un viaje sin tener todo planeado. Quizás pienses, ¿acaso eso no limite las posibilidades de lo espontaneo?, no necesariamnte. Tener todo planeado no significa que uno vaya a seguir todo al pie de la letra. De lo que se trata es poner en concreto que lugares uno no quiere perderse. Poder planear con respecto a ellos comos serán los trayectos. Y por supuesto, sabiendo que siempre pueden haber cambios, desde una ciudad que te atrape y decidas quedarte más tiempo y, quien sabe, quizás para toda la vida hasta otros viajeros que conozcas y termines recorriendo destinos que no estaban en tus planes.

Cualquiera sea el caso, siempre tu itinerario dependerá de varios factores como son las temperaturas, las multitudes que puedan haber en caso de que viajes en temporada alta, la geografía, tus posibilidades de tiempo y por supuesto tu estilo de viaje (¿estas ansioso por ver todo lo que puedas o te gusta quedarte en cada lugar varios dias?). Tomá en cuenta los siguientes consejos para cuando armes tu itinerario por Europa:

A tener en cuenta al armar el itinerario

Al armar el itinerario, no olvides de considerar aspectos como el clima, tu salud, el cansancio, festivales (y otros eventos a los que quieras ir) y también el "shock cultural" que puedas tener al llegar a una nueva ciudad. Así viajaras más preparado, cómodo y feliz.

Establecer un plan de viaje logico. Recorrer Europa tiene dos factores importantes, tiempo y costo. Llegar y salir de la misma ciudad puede no ser siempre la opción más barata o logica en cuanto a tiempo. Podes evitar tiempo y costo de viaje innecesario volando a un aeropuerto y volviendo desde otro. Por lo general solo se paga la mitad del pasaje de ida y vuelta.

Y aún cuando el pasaje pueda salirte más caro de esta forma, es posible que no sea así cuando calcules los costos de las conexiones que tendrás que realizar para volver al punto de partida. Por ejemplo, podrías llegar con un vuelo a Londres, viajar hacia el este visitando las ciudades que te interesen de Europa y luego volver de vuelta a tu país desde Atenas. Esto elimina la necesidad de tener que volver a Londres al momento de regresar a tu país, que haciendo las cuentas, puede llegar a ser más caro en tiempo y/o dinero que haber vuelto desde un aeropuerto distinto. Por tanto, no olvides chequear tu llegada y salida desde varias ciudades antes de decidir.

Hacé coincidir tus destinos con tus intereses. Si te apasiona el arte renacentista, no podes perderte Florencia. La campiña inglesa es sin dudas otro infaltable para quienes fantasean con cabañas encantadoras, pueblos que se mantienen intactos con el paso del tiempo y ovejas pastando por colinas repletas de verde. Para los amantes de la segunda guerra mundial no hay experiencia más exitante que conocer Normandia. Los amantes de la cerveza seguramente quieran peregrinar a Belgica. Si lo tuyo son las grandes ciudades vas a disfrutar de Londres, Roma y Venecia. Si buscas algo fuera de lo común ir a Mostar en Bosnia o a Tánger en Marruecos son excelentes opciones.

Ir de menor a mayor. Si es la primera vez que viajas fuera de tu país, quizás te convenga organizar tu viaje de forma que veas los paises de menor a mayor en cuanto a sus diferencias culturales. Si pensas ir a Inglaterra, los alpes, Grecia y Turquía, lo mejor es hacerlo en ese orden de forma que el viaje aumente en intensidad y locuras a medida que uno lo recorre.

Viajar directamente a Estambul como primer destino puede ser un tanto abrumador si es la primera vez fuera de tu país o si no estas acostumbrado a viajar.

Es una excelente idea ya que aún si Turquía no te presenta ningún reto, el resto de destinos serán más aburridos o similares a lo que uno ya conoce. Empezá por donde un té y macitas es algo exótico y continuá hacia lugares más exóticos hacía el este y el sur del continente, como Turquía, Nápoles o Cracovia.

Si sos descendiente de Europeos una gran opción es ir a visitar el lugar de tus ancestros. Es indescriptible la cantidad de personas que conoceran haciendo algo parecido.

De ser posible intentar sufrir lo menos posible con el calor viajando a la región del Mediterraneo en primavera y hacia el norte de Los Alpes en verano. Hacé coincidir el mes más frío de tu viaje con la zona más caliente y viceversa. Si tu viaje comienza en primavera o a principios del veran te conviene comenzar por los países del sur e ir hacia el norte de forma de disfrutar de las temperaturas agradables la mayor parte posible del viaje. Siempre que puedas evita viajar en pleno verano al sur, fundamentalmente a las costas mediterraneas, el sur de Italia y Francia. Pasar esas semanas en países del norte como los escandinavos es una excelente alternativa así como también lo son Inglaterra, Irlanda o Los Alpes. Esto también hará que aumenten tus chances de tener dias soleados y agradables en regiones que tienden a ser de dias nublados y frios.

Alternar las grandes ciudades con los pequeños pueblos y la campiña. Por ejemplo, dale un corte a tu tour por Venecia, Florencia y Roma con un paseo por los pueblos en las colinas italianas o en la riviera italiana. Juzgar Italia solo por Roma es como juzgar Estados Unidos solo por Nueva York.

Sumate a la fiesta. Si te gustan las fiestas, andá a cuanto festival, fiesta nacional y evento artístico encuentres (o si odias las multitudes revisa que fechas evitar). Esto por supuesto toma cierto tiempo para planear y una opción es consultar con las oficinas nacionales de turismo, también pueden consultar la lista de eventos y festivales en Europa junto con sus sitios web oficiales (la mayor parte de los grandes eventos tienen sitio web). Organizarte para ver los lugars en el momento indicado permitirá que puedas participar de todos los eventos que quieras. No olvides reservar el alojamiento con anticipación, los grandes eventos suelen dejar sin lugar al sector hotelero local.

Aprovechá los vuelos baratos dentro de Europa. En los últimos años ha aumentado la cantidad de aerolineas de bajo costo en Europa, cambiando la forma en que la gente planea sus itinerarios de viaje.

Evita las visitas de una noche. Aún el itinerario más apresurado se merece al menos noches por destino. Si bien puede ser una opinión personal, es bueno considerar si no es mejor apretar los viajes y las visitas en el dia lo más que puedas para encajar al menos dos noches en la misma cama por destino.

Realizar menos cambios de hotel suele ser más económico y te dará la sensación de que realmente disfrutas las ciudades al pasar una segunda noche.

No olvides de dejar algo de espacio para la improvisación en tu itinerario. No organices todo muy ajustado (algo que tienden a hacer quienes viajan por primera vez o con poco tiempo). Cosas del dia a dia, pequeños problemas con el transporte, tu salud o el poder flexibilizar tus planes ante acontecimientos inesperados merecen de ser posible un dia a la semana.

Si vas de viaje por mucho tiempo, meses por ejemplo, considerá tomarte una vacación dentro de la vacación en el medio. La mayor parte de las personas que viajan por mucho tiempo necesitan al menos una semana de disfrutar de una ciudad sin estar corriendo de aquí para allá, con un museo o actividad a la cual ir. Descansar unos dias en la montaña, en alguna playa o isla (libre de grandes grupos de turistas) o alojandote en la casa de un familiar o conocido es una buena forma de revitalizar tu espíritu y energías de viajero.

Asumí que volverás. Esta es una de los secretos para ser un viajero feliz. No puedes ver todo Europa en un solo viaje -ni lo intentes. Disfrutá lo que estas viendo. Olvidate de las cosas que no has podido completar en este viaje. Si viajas preocupado por las cosas que no vas a poder ver no vas a poder disfrutar de lo que este delante de tus ojos. Aunque hayas viajado decenas de veces a Europa nunca la verás toda. Siempre quedará algo por ver y esa es la magia de Europa. Una excelente excusa para volver nuevamente.